Quercus canariensis

Las hojas son simples, alternas y subpersistentes, pudiendo aguantar más de un ciclo estacional, por lo que la especie se clasifica como marcescente o caducifolia.[3]​[4]​ Tronco derecho, robusto, con corteza pardo-grisácea o cenicienta, resquebrajada en grietas poco profundas, longitudinales y transversales, en los ejemplares más viejos.Requiere un clima suave, sin heladas frecuentes, y bastante húmedo, por lo que no se suele alejar mucho de la influencia marítima.Sobre el origen canario, hay varias hipótesis, de las cuales se destacan dos: Según la primera, el botánico alemán Carl Ludwig Willdenow que la describió en Berlín, no había visto esta planta en el campo; o el recolector (Broussonet), debieron confundir la etiqueta creyendo que había sido recogida en las Islas Canarias, cuando probablemente procedía de Marruecos.Quercus canariensis fue descrita por Carl Ludwig Willdenow y publicado en Enumeratio Plantarum Horti Botanici Berolinensis, .
Vista del árbol
Hojas y fruto
Inflorescencia
En su hábitat
Hojas