La fotografía estuvo a cargo de Tim Maurice-Jones, mientras que la música fue compuesta por Alex Heffes.
Al final del episodio suena el tema Exit (For a Film), de la banda británica Radiohead.
En su devenir Kenny conoce a Héctor (Jerome Flynn), un hombre de mediana edad, chantajeado por el mismo hacker.
Kenny (Alex Lawther) es un joven de 19 años tímido y socialmente inadaptado que trabaja en una cafetería.
Tras descargar una aplicación anti-malware para limpiar el ordenador, en realidad un programa que otorga el control de la cámara del ordenador al hacker creador de la aplicación, Kenny termina siendo grabado mientras se masturba con unas fotos que encuentra en la red.
En el lugar indicado, Kenny se encuentra con un hombre (Paul Bazely) quien, también chantajeado, recibió órdenes de pelear a muerte con Kenny mientras el chantajista presencia todo a través de un dron equipado con cámaras.
Quien consiga salir vivo de los dos se llevará la bolsa con el dinero robado del banco.
Kenny protesta y, entre lágrimas, confiesa que tan sólo se trataba de algunas imágenes.
Kenny se intenta suicidar con el arma del pastel pero, al descubrir que no estaba cargada, finalmente comienza a pelear.
Después de deshacerse del auto Héctor vuelve a su casa donde todo está, aparentemente, en orden.
Kenny, ensangrentado y tras, aparentemente, haber matado al hombre con el que debía pelear, recibe una llamada de su madre.
Con esto no decimos que sea una mala serie pero sí puede tener capítulos muy mediocres y otros tremendamente estimulantes.