Un origen aristocrático puede explicar su temprana relación con la corte real francesa: ya en la década de 1450 aparecen referencias a él, y en 1461 era capellán en Tours.Al convertirse en duque de Borgoña, pronto se le conoció como Carlos el Temerario por su feroz y a veces temerario aventurerismo militar (que de hecho le llevó a la muerte en batalla diez años después).La mayoría tienen textos franceses, a menudo de sí mismo, son tres voces y utilizan estructuras fijas, sobre todo el rondó (una treintena).En el apartado de música religiosa, se conservan misas, un credo, himnos, un magnificat y motete.Las misas utilizan la técnica del cantus firmus, una de ellas se basa en la célebre fanfarria L'homme armé.