Benjamin Harrison

No en vano, en 1871 el presidente Ulysses S. Grant lo había requerido para recurrir ante el Tribunal Supremo una sentencia adversa a un veterano de dicho conflicto, lo que le granjeó la simpatía de este colectivo.

[8]​ En la derrota de este último jugó un papel decisivo la actitud del aparato del propio Partido Demócrata de Nueva York, el Tammany Hall, enfrentado al presidente Cleveland por sus medidas contra la corrupción.

Finalmente, los 36 votos electorales del estado de Nueva York fueron para el candidato republicano, Harrison.

Por lo tanto, Benjamin Harrison no ganó por una victoria aplastante, pero recogió una herencia política y económica desconocidas hasta la fecha.

En primer lugar y por primera vez en décadas, los republicanos tenían mayoría tanto en el Senado, como en la Cámara de Representantes.

La ley Sherman, concebida contra los trusts y ratificada en 1890, declaraba ilegal cualquier fusión de empresas que restringiera el comercio entre Estados o con naciones extranjeras.

Vaga en su redacción, la ley Sherman se fue reforzando con sucesivos presidentes, ya en el siglo XX.

Esta ley se enmarca en los conflictos entre platistas y defensores del patrón oro anteriores a la adopción de este último en 1900 por el presidente McKinley.

Finalmente, el archipiélago hawaiano no pasó a manos norteamericanas hasta la presidencia de McKinley, en 1898, si bien no se incorporó a la Unión como estado federado de pleno derecho hasta 1959, siendo el último estado constituido en EE. UU.

En 1896 se casó con Mary Scott Lord Dimmick, una viuda veinticinco años más joven que él.

Para ello, el expresidente redactó un informe de 800 páginas, que expuso en veinticinco horas, durante cinco días.

Cayó enfermo unos años después, y en 1901 murió de neumonía tras sufrir una severa gripe.

El general Harrison (a la izquierda) con otros comandantes del XX Corps, en 1865.
Resultados de las elecciones de 1888.
Investidura presidencial de Benjamin Harrison, el 4 de marzo de 1889. Cleveland sostiene el paraguas de Harrison.
Tumba del presidente Harrison en el Cementerio Crown Hill