[1] Tras su muerte, dicho sumo sacerdote se convirtió en un personaje simbólico, denominado «el Renuevo» (Esd 3:8; Zac 6:12).
El deletreo del hebreo bíblico moderno usualmente contrae el elemento teofórico Yeho-.
De acuerdo con David Flusser y Shmuel Safrai, el nombre Yeshúa se habría pronunciado Yeshú durante el siglo I d. C.[4] De ahí que la transcripción griega omita la -a final, cuando hay numerosos nombres masculinos griegos acabados en -ας (-as).
[6] Es quizás por ello que, tiempo después, se comenzó a escribir el nombre según dicha pronunciación: ישו (Yeshú).
[nota 1] Se ha demostrado, no obstante, que la adición de una -a- larga (pataj furtiva) a las letras guturales jet, ayin y he con mapiq fue un invento masorético del siglo VII d. C.[cita requerida] Por ello, la pronunciación más antigua debió haber sido Yehoshúʿ o Yeshúʿ, aunque en hebreo moderno ambas palabras se pronuncian con -a- al final.