Por aquel entonces, como muchos otros pintores, desde pequeño ya tenía fama de buen dibujante.
Tras realizar un curso en Forúa para el aprendizaje del latín, prosigue su formación franciscana ya en Zarauz.
Ha realizado exposiciones en San Sebastián, Bilbao, Vitoria y otras capitales europeas.
Un híbrido de iconografías cristianas, mezclado con representaciones contemporáneas, llevando lo religioso al momento actual.
Ver los bocetos es como una enciclopedia de sus preocupaciones sociales, engarzadas con pasajes religiosos que a Egaña le son cercanos.