El Wudu o la Ablución (en árabe: الوضوء, romanizado: Al- WUDÛ) es un rito islámico que consiste en lavar el rostro, los brazos y las manos, así como ungir la parte superior de la cabeza y los empeines de los pies, en la forma que se ha explicado en las fuentes islámicas.
[3] En árabe, la palabra "wudu" (وضو) se deriva de la raíz “وضء”, que significa pureza y limpieza.
[2] El Wudu es un acto recomendable, pero se convierte en obligatorio para ejecutar los siguientes actos: Los Hadices islámicos recomiendan realizar el Wudu antes de proceder a algunas acciones, como recitar el Corán, hacer súplicas, ir a una Mezquita y, según la opinión de los chiitas, también para visitar los Santuarios de los profetas del Islam y los imames.
[7] Por lo tanto, los sunitas se lavan los pies en vez de pasar la mano húmeda sobre ellos.
Pero, yo vi que el Profeta realizó la unción sobre el empeine de sus pies.”[7] Ashadu an la ilah hah ill'Allahu wahda hula sharika lah, Wa ashadu ana Muhammadan ' ab duhu wa rasul (Declaro que ninguno tiene el derecho para ser adorado excepto Dios solo sin compañeros, y declaro que Mahoma es su esclavo y mensajero).
La unción de la cabeza Después de lavar los brazos y las manos, se debe untar la parte superior de la cabeza con la humedad que queda en la mano, y según la precaución obligatoria hay que hacerlo con la mano derecha, y es mejor untarla desde arriba hacia abajo.
Si hubiera en el rostro o en las manos una herida, una ampolla o una fractura descubierta a la cual le perjudica el agua, es suficiente con lavar alrededor de ella en señal de Wudu; no obstante, si es posible, hay que pasar la mano húmeda sobre ella, y si no es posible, es recomendable poner una tela pura sobre la herida y pasar la mano húmeda por encima de ella.