Son perros activos y juguetones, similares físicamente al galgo inglés, pero de tamaño mediano.
A finales del siglo XVIII, las clases populares inglesas no se podían permitir el gasto que suponía la posesión de un "verdadero galgo", por lo que este sector inventó su propia versión más pequeña y asequible, dando lugar al Whippet.
Debe tenerse en cuenta que el galgo inglés, descendiente directo del galgo español, era considerado un perro noble y que en ciertos momentos de la historia estuvo prohibido poseer uno si no se pertenecía a la nobleza.
Dicho esto, había una raza llamada «wappit», a la que se hace alguna referencia durante las primeras décadas del siglo XIX.
Los Whippet fueron clasificados como raza en un certamen canino celebrado en Darlington en 1876, pero la raza no fue reconocida por el Kennel Club de Inglaterra hasta 1890, inscribiéndose en el libro de orígenes genealógicos los cinco primeros Whippet al año siguiente.
Fue conocida principalmente por sus Borzoi y sus Fox Terrier, aunque presentaba de vez en cuando a algún Whippet.
Hubo muchos criaderos importantes e influyentes en esos primeros tiempos, algunos de los cuales habían sido fundados incluso antes del siglo XX.
En los años sesenta las inscripciones se dispararon, y esto no siempre es algo bueno para una raza, pero afortunadamente los entusiastas del Whippet son un grupo que muestra una gran dedicación.
Durante la última década del siglo XX, las inscripciones permanecieron estables en Gran Bretaña, con 1.431 a 1.747 Whippet inscritos anualmente, siendo la segunda cifra indicativa de un pequeño pico en 1996, aunque estas cifras se redujeron después en una centena aproximadamente.
En 1999, el Whippet Club celebró su centenario, llevando a cabo una exposición que duró dos días.
Tuvo un gran respaldo e incluyó todos los aspectos de esta raza, entre ellos el adiestramiento para la obediencia, la agilidad y las carreras persiguiendo una liebre mecánica.
Aunque la Ladies Kennel Association (una asociación canina con asociados exclusivamente femeninos) celebró una carrera de Whippet a la que honraron con su presencia el rey Eduardo y la reina Alejandra, no tuvo el éxito que se esperaba.
Los destinados únicamente a las carreras en pista debían tener la potencia necesaria para iniciar la carrera rápidamente y, sin entorpecer a los demás participantes, debían correr con gran velocidad hasta el final de la pista.
Los perros solían pelearse en la pista y en algunas de ellas se dividían las calles con lonas o redes para evitar este problema.
Las descripciones de estas primeras carreras eran muy detalladas e incluían curiosos detalles, como, por ejemplo, la zancada de un perro de 8 kg, que podía sobrepasar los 4,5 m. Se empleaba mucho tiempo, trabajo y dinero para tener al Whippet en plena forma para las carreras, ya que se llevaban a cabo fuertes apuestas para que los esfuerzos valiesen la pena.
Algunos eran mantenidos prácticamente ocultos, excepto cuando les tocaba correr, y eran alimentados y atendidos por una única persona, con lo que se les privaba de lo que hoy día consideramos como el tan esencial compañerismo.
En otros aspectos, estos apreciadísimos perros eran tratados con cariño, pero los estándares de los cuidados caninos no eran entonces los que tenemos actualmente.
El criadero estadounidense más famoso en la actualidad es Sporting Fields, y sus perros dominan en la mayoría de las exposiciones que se celebran en los EE.
Al igual que en otros países, los aficionados escandinavos están muy dedicados a su raza, y el Svenska Whipptklubben (Asociación Sueca del Whippet) fue fundado en 1976.
Estas elevadas cifras suelen requerir la actuación de dos jueces: uno para los machos y otro para las hembras.
Muchos aficionados a los Whippet disfrutan con la raza, consigan o no grandes triunfos en los certámenes caninos.
La otra hipótesis sostiene que el Whippet procede de cruzar al galgo inglés con Manchester terriers, o con Spaniels.
Actualmente, estas carreras se han formalizado y ya no se realizan en callejones, sino en pistas reglamentarias, también rectas, en las que los Whippets persiguen un peluche con forma de conejo mecanizado, en vez de un pañuelo.
Para empezar, se podría decir que el Whippet aprovecha su complexión más pequeña para poseer una aceleración inigualable, incluso para un galgo inglés.
Por lo tanto, en una distancia muy corta el Whippet podría vencer a su pariente de mayor tamaño y fama.