Waldemar Espinoza Soriano

Sus estudios secundarios los realizó en el Colegio Nacional San Ramón de su ciudad natal (1948-1952).

[1]​ Los tempranos indicios que mostraba por los estudios históricos se manifestaron cuando, aun siendo alumno del plantel y basándose en la historia del mismo, escribió su primer artículo, el cual se publicó en la revista oficial de la institución.

Durante los 4 años que duró su estadía en la península ibérica,[1]​ Waldemar Espinoza entró en contacto con historiadores como Miguel Maticorena Estrada y Guillermo Lohmann Villena, además de recibir la visita de investigadores como John Murra.

Sin embargo, la estatización de la Universidad Comunal del Centro le presentó una inesperada oferta.

La convertida en Universidad Nacional del Centro convocó un concurso de profesores en la cual Waldemar Espinoza decidió participar.

[2]​ Sin embargo, la ausencia en Huancayo de las bondades culturales que poseía la capital (congresos, publicaciones, etc.) lo motivaron a regresar a Lima, tras trece años de permanencia en el valle del Mantaro.

Los cursos que tuvo a su cargo fueron: Seminario de Tesis, Etnohistoria e Historia del Perú II: Conquista y Colonia.

Comienza por hacer un recuento de las teorías tradicionales que atribuían el triunfo español a las siguientes razones: la superioridad militar y tecnológica de los españoles (el hierro, armas de fuego, los caballos); la supuesta superioridad racial del europeo frente al hombre andino; la ayuda divina con que contaban los españoles por ser portadores de la religión verdadera (el cristianismo); la guerra civil entre Huáscar y Atahualpa, que debilitó al imperio; el absolutismo exagerado del Estado Inca, que había convertido a sus súbditos en prácticamente autómatas, de modo que caído el líder, todo se venía abajo.

Por ende, la obra está influenciada por matices políticos que perseguían el objetivo de fomentar una nueva identidad e impulso moral en el Valle del Mantaro, especialmente en la naciente Huancayo- Los incas, subtitulada: «Economía, Sociedad y Estado en la era del Tahuantinsuyo», fue publicada en 1987.

Luego abarca la organización del ayllu, la vida cotidiana del campesino o hatunruna, la organización social, el sistema administrativo y el desarrollo cultural de los incas (tecnología, arte, ciencias, literatura y religión).