El avión que operaba el vuelo, un Lockheed L-1011 Tristar, se incendió en el antiguo aeropuerto de Riad tras haber aterrizado.
La aeronave involucrada en el accidente era un Lockheed L-1011-200 TriStar de un año y un mes (registrado en Arabia Saudita como HZ-AHK).
El capitán del vuelo era Mohammed Ali Khowyter, un saudí de 38 años que fue contratado por Saudia en 1965.
Los registros de Khowyter lo describen como un aprendiz lento y que necesitaba un entrenamiento más adecuado.
El primer oficial era Sami Abdullah M. Hasanain, de 26 años, también saudí que se unió a la aerolínea en 1977 y anteriormente había trabajado como aprendiz.
6 minutos después del despegue, una alarma suena en la cabina indicando incendio en las bodegas de carga.
Más tarde el ingeniero de vuelo se dirige a la parte trasera del avión para verificar si efectivamente había algo anormal.
Es hasta hoy el peor accidente aéreo registrado en Arabia Saudita y el más fatal del mundo involucrando a un Lockheed L-1011 TriStar.