Voto nulo
Típicamente se concreta incluyendo papeletas con logos no registrados en la elección, caricaturas o animales,[1] que expresan una posición política.Suele ser mayor en los países con sistemas de voto obligatorio, ya que en los que es opcional los descontentos, desinteresados e incapacitados pueden simplemente no concurrir a votar.Tanto los votos impugnados como los recurridos deben ser analizados uno por uno por la autoridad electoral durante el escrutinio para establecer si se trata de un voto válido o nulo.En el escrutinio definitivo no existe la categoría de votos impugnados o recurridos, que sólo aparecen en el escrutinio provisorio, y solo existen tres categorías de votos: positivos, en blanco y nulos.Por ese motivo algunas personas lo prefieren al voto en blanco como forma de emitir un voto de protesta que no dificulte el escaño a partidos minoritarios, pero no se pueden distinguir los nulos intencionados de los no intencionados y (al igual que el voto en blanco y la abstención) benefician a los partidos elegidos en el sentido de que les otorga más representación en los parlamentos del apoyo real que tienen entre los ciudadanos[3]