Ellison presentó la antología tanto colectiva como individualmente, mientras que los autores redactaban en todos los casos los epílogos de sus propias historias.
Tanto las historias individuales como la propia antología recibieron gran cantidad de premios.
Philip José Farmer empató para el Hugo a la mejor novela con Jinetes del salario púrpura (Riders of the Purple Wage).
Samuel R. Delany ganó el Nébula de relato corto con Por siempre y Gomorra (Aye, and Gomorrah...).
La tercera antología proyectada, «The Last Dangerous Visions», para la que incluso se habían adquirido ya diversos relatos, es casi una leyenda como el libro inédito más famoso de la ciencia ficción.