Keane puso un anuncio en periódicos para estudiantes y contactó con una mujer dispuesta a dicho acuerdo.
En 1987 los juzgados dieron validez al acuerdo de subrogación y concedieron la custodia legal a los Stern.
[12][cita requerida] En 1988, debido a la repercusión del caso Baby M, el estado de Míchigan aprobó una ley para prohibir completamente la gestación subrogada.
Los embriones son transferidos a la gestante, que gesta y alumbra al niño sin tener ninguna relación genética con este.
Por un lado, tras en 2003 comenzó un plan gubernamental para promocionar el país como destino turismo médico con incentivos financieros y visados especiales.
Entre los países europeos que prohíben expresamente la gestación por sustitución se encuentran España,[20] Francia, Italia, Alemania, Suiza y Suecia.
Entre los que la han dotado de un marco legal se encuentran: Portugal,[21] Grecia, Reino Unido, Bélgica[22] y Países Bajos,[23] aunque con distintos matices.
[23] Francia ha sido muy activa en este debate planteando una campaña internacional en apoyo de la decisión del Gobierno francés que ha legislado para evitar otorgar la nacionalidad a los niños concebidos por esta técnica con el fin de desincentivar esta práctica entre los ciudadanos franceses.
* Una gestante en Canadá no puede recibir ninguna compensación económica, ya que esto implicaría un beneficio por gestar un niño[26].
El alquiler de vientres fue tajantemente descartado en las consultas populares previas a la elaboración del código.
En este país de Asia solamente pueden recurrir a la gestación subrogada las parejas heterosexuales casadas en las que la mujer acredite no poder gestar por problemas médicos.
[53] La legislación ha convertido a Rusia en un destino para los que viajan al extranjero en busca de las técnicas no disponibles en sus respectivos países.
En caso de que han recurrido a una donación, no tiene importancia alguna la relación genética incompleta con el nacido.
En 2002 se introdujo en Grecia la ley 3089/2002 sobre reproducción humana asistida médicamente que incorporaba reglas específicas para permitir la subrogación, dándole un marco legal y regulando la transferencia de filiación.
Además solo pueden acceder a ella mujeres con pruebas médicas que confirmen la imposibilidad de gestar por sí mismas.
[70] Esta ley fue declarada inconstitucional en 2018, pero tras añadir el derecho al arrepentimiento de la gestante, se aprobó en 2021 aunque no es posible acogerse a ella debido a que no está todavía desarrollado el reglamento que permita su aplicación.
Canadá, por ejemplo, tiene una regulación muy restrictiva de estos reembolsos,[76] mientras que el Reino Unido los restringe a "gastos razonables y justificados".
[78] Esta es la línea seguida por la mayoría de las sociedades y autoridades en la materia, como la American Fertility Association.
Procedimientos más complicados, como depositar los espermatozoides directamente en el útero, son empleados según cada caso y aumentan la probabilidad de que la fecundación tenga éxito.
[cita requerida] La técnica de reproducción asistida que hace posible la subrogación gestacional es la fecundación in vitro (FIV o IVF por su sigla en inglés).
Se han insinuado posibles conflictos que pueden afectar a cada uno de los implicados en el proceso.
Al parecer, el derecho del menor a conocer su origen se respeta mucho más en caso de gestación por sustitución.
Es más, las conclusiones de este trabajo sugieren que la relación biológica entre padres e hijos no es esencial para el ajuste positivo del niño.
Por el contrario, los que conocen su origen en la etapa adolescente tardía o adulta, sobre todo si el conocimiento es accidental o por circunstancias adversas, como un divorcio, parecen mostrar las respuestas más negativas con ira hacia sus padres y sentimientos de traición y desconfianza.
[97][98][99][100][101] Recientemente, en 2017, Irene Woo llevó a cabo un estudio de los efectos físicos en este proceso, en él, aumenta los resultados perinatales adversos, incluidos el parto prematuro, bajo peso al nacer, hipertensión, diabetes gestacional materna y placenta previa, en comparación con los embarazos concebidos espontáneamente por la misma mujer[102].
Además, la oxitocina produce las contracciones del útero postparto, lo que ayuda a disminuir el riesgo de hemorragias.
Todo ello pese a que el embrión no tuviese información genética de la gestante.
De esta forma, se produce un microquimerismo fetomaternal, lo que puede suponer importantes implicaciones para el sistema inmunológico materno.
Esta práctica, en sus diversas variantes, ha sido un tema tratado en la cultura popular, tanto en el cine como en novelas y series.
Algunas películas sobre vientres de alquiler son Femmes ou maîtresses (Jean-Marie Pallardy, 2001), Como los demás (Vincent Garenq, 2008) y Melody (Bernard Bellefroid, 2014).