Un videojuego no lineal presenta al jugador desafíos que pueden ser completados en un número de secuencias diferentes.
Por ejemplo, un videojuego no lineal puede permitir múltiples secuencias para finalizar el juego, una elección entre caminos a la victoria, o misiones opcionales y argumentos secundarios.
[1] Una historia verdaderamente no lineal será escrita enteramente por las acciones del jugador y es por lo tanto un difícil reto de diseño.
[1] Como tal, las historias no lineales usualmente preservan el arco narrativo global mientras permiten múltiples soluciones a un desafío en particular, o una decisión entre varios retos.
Como con otros elementos del juego, el diseño lineal de un nivel no es absoluto.
Un juego más lineal requiere que un jugador finalice niveles en una secuencia fija para poder ganar.