Los compañeros del Servicio de Publicaciones del Instituto Geográfico le ofrecieron publicar un trabajo suyo.
El libro va dedicado a Maruja y Almudena.
Cinco años más tarde es cuando el ING le da vida con su publicación, que fue la única que editó de su género.
La edición a los pocos años se agotó, y después no se volvió a reeditar de nuevo, por lo que se considera como un libro fantasma.
También lo compara con ese viaje a la Alcarria de don Camilo.