No obstante, se desconoce si los territorios sobre los que tuvo autoridad oficial comprendían la totalidad de la provincia o únicamente una parte de ella, debido principalmente a un desacuerdo entre las fuentes historiográficas con las que se cuenta en nuestros días, el hebreo Flavio Josefo y el romano Tácito.
Su tiempo en el cargo estuvo marcado por las constantes disputas entre su ejército y la población judía.
Este lo consideró responsable de la violencia desatada en la zona y lo condenó al exilio.
Las tensiones comenzaron cuando los peregrinos judíos acudieron a Jerusalén para celebrar la festividad de la Pascua.
Cuando un esclavo imperial llamado Estefano fue interceptado mientras viajaba cerca de Beth-horon se desencadenaron más disturbios.
Enfadados por esta afrenta a su dios y a su religión, los sectores judíos más radicales marcharon hacia Cesarea Marítima exigiendo el castigo de los culpables.
El resto fueron convencidos por los líderes de Jerusalén para que abandonaran la lucha.
[15] Cuadrato accedió a investigar, e inició sus pesquisas en el año 52 en Judea, donde ordenó que todos los prisioneros judíos que Cumano había capturado fuesen crucificados y ordenó la ejecución por decapitación de varios otros judíos y samaritanos que se habían visto implicados en la lucha.