Vanessa Mae

Nicholson, además de abogado era violinista y se ilusionaba con tener a su hija como acompañante.

Así, Vanessa Mae tuvo su primer acercamiento al violín a los cinco años, en la escuela, aunque todavía solo como un juego.

Además, se inició en el estudio del idioma mandarín y elaboró trabajos prácticos para su escuela de Londres.

A los diez años sus padres le compraron un costoso violín fabricado por el lutier italiano Giuseppe Guadagnini en 1761.

Su precocidad musical y talento natural fue bien visto por el director del Royal College of Music, quien la admitió como alumna regular con tan solo once años para tomar clases avanzadas con el profesor Félix Andrievsky.

Para los demás temas del disco se recurrió a la creatividad de Mike Batt, un experto en música pop instrumental.

El primer vídeo comercial puesto a la venta se filmó también en 1995, bajo el título Live at the Royal Albert Hall.

También organizó una gira mundial que la llevó a dar docenas de conciertos por toda Europa y Asia, "The Red Hot Violin Player World Tour".

Otro evento trascendente de aquel año fue el lanzamiento del álbum pop "Storm" y de este llegó una nueva gira mundial, la Storm on World Tour con el cual realizó múltiples conciertos por Europa, Asia y América.

Otro hecho importante fue la invitación que le hizo el director y arreglista George Martin (exproductor de Los Beatles) para colaborar en un tema.

Apenas un mes más tarde, por desacuerdos entre ella y su mánager Mel Bush, aparentemente por la vinculación de este con el flamante cuarteto femenino de cuerdas bond, era buen momento para terminar también aquella relación que se había prolongado durante siete años.

Este álbum dio paso a una gira por toda Europa, llamada "Tour of Change".

MTV Asia decidió premiarla como "Mejor artista Crossover del año", en una ceremonia que se celebró en Hong Kong.

El 2002 comienza en los Estados Unidos y allí, el 7 de marzo se abrieron oficialmente los Juegos Paralímpicos donde Vanessa musicalizó la ceremonia, interpretando "Storm".

La policía logró detenerlo un día en que el desquiciado portaba un montón de cartas para ella y un puñal.