El municipio está atravesado por el río Cofio, uno de los principales afluentes del Alberche y éste del Tajo, con lo que su término queda adscrito a la cuenca hidrográfica de este último río.
Aunque algunas hipótesis señalan que su origen es romano, las primeras referencias escritas de Valdemaqueda no aparecen hasta el año 1340.
Sus bases económicas se han sostenido tradicionalmente en la producción de arcilla, muy abundante en el valle del río Cofio, y en la industria maderera, gracias a sus frondosos bosques de pino y encina.
Hacia mediados del siglo XIX, el lugar tenía contabilizada una población de 86 habitantes.
Aunque es designado popularmente como puente romano, es de origen bajomedieval o prerrenacentista.
El pueblo aún conserva elementos de arquitectura rural, entre los que destacan algunas fuentes, molinos y edificios.
En Valdemaqueda hay un guardería y un colegio de carácter público ambos centros.