Emigró a la Argentina, donde encontró trabajo como obrero metalúrgico y de la carne.
Posteriormente se alejó de este partido y realizó algunas acciones por cuenta propia: una de ellas le dejó como saldo una pistola y el apodo Dedo, porque fue poniéndoselo en la espalda como desarmó a un policía.
[2] Finalmente estableció contacto y se unió al Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), organización en la que llegó a ser miembro de la Dirección Militar.
Se fugó en febrero de 1972 haciéndose pasar por su hermano, quien lo había visitado simulando ser su abogado.
[3] El músico argentino Andrés Calamaro menciona la última acción del El Gallego en su canción «22 de Agosto»:[9]