El término tumbaga es el nombre que los españoles dieron a una aleación de oro y cobre que fabricaban los orfebres indígenas de América.
Por otra parte, los indígenas de la cultura lambayeque (cultura andina) le decían tumbaga a la mezcla de oro con cobre y plata.
Numerosas culturas precolombinas que destacaron por su rica orfebrería, como la de la Tolita, la tairona o la quimbaya, utilizaron la tumbaga para elaborar diversos objetos ceremoniales y adornos.
La tumbaga fue ampliamente utilizada por las culturas precolombinas de América del Sur y Central para hacer objetos religiosos.
Como la mayoría de las aleaciones de oro, la tumbaga era versátil y podía ser moldeada, estirada, martillada, dorada, soldada, enchapada, endurecida, recocida, pulida, grabada, e incrustada.