Trimetadiona

La separación parcial de las propiedades sedantes, hipnóticas y anestésicas y las propiedades anticonvulsivas que caracterizaban al fenobarbital motivó la búsqueda de agentes con efectos más selectivos en las funciones del SNC.

Sin embargo, debido a su potencial toxicidad, se prefieren otros antiepilépticos más seguros.

Las oxazolidindiona son compuestos de considerable interés histórico porque abrieron una nueva era en la farmacoterapia para la epilepsia.

[4]​ Sobre una base molar, la trimetadiona no metabolizada tiene 1.25 veces la potencia anticonvulsiva de la dimetadiona.

[6]​ Se reconoció pronto que los efectos secundarios tóxicos pueden seguir a la administración prolongada de la droga, tales como dermatitis, hepatitis, fotofobia, somnolencia, náuseas, anemia aplástica y agranulocitosis.