[cita requerida] En la China del siglo II, el médico Hua Tuo administraba narcóticos a sus pacientes y trasplantaba órganos dañados.[cita requerida] En el siglo XVIII, el escocés John Hunter, «el padre de la cirugía experimental», realizó los primeros xenotrasplantes y autotrasplantes en animales.En las décadas siguientes, se avanzó mucho con los procedimientos de piel y córnea, así como en que hubiera una mejor cicatrización y curación tras las operaciones, pero aún era muy alto el porcentaje de mortandad por septicemias, rechazos e infecciones.[cita requerida] Finalmente, el siglo XX fue el que aprovechó estos avances y cosechó los éxitos.En 1954, una vez que se conoció la estructura molecular del ADN, un equipo de varios médicos realizó el primer isotrasplante en Boston, EE.El donante y el receptor son individuos distintos, pero genéticamente idénticos, como gemelos univitelinos.Para evitar el rechazo generalmente se necesita tener en cuenta la inmunocompatibilidad entre donante y receptor.En la mayoría de casos es necesario seguir tomando fármacos inmunosupresivos por la vida del injerto.Para que el donante pueda sobrevivir después del procedimiento, el órgano o tejido extraído debe ser renovable o no esencial para la vida; por ejemplo, un solo riñón de una persona que tiene un par de riñones normales, la sangre, la piel, la médula ósea y los lóbulos del hígado pueden ser trasplantados de esta manera.También se puede sacar órganos y tejidos de un individuo que ha sufrido un paro cardíaco.El sujeto en muerte encefálica va a llegar indefectiblemente, en breve plazo, al paro cardíaco, dado que es mantenido respirando en forma artificial y su situación es irreversible.El individuo con la supuesta muerte cerebral debe presentar diversos signos entre la media hora y las seis horas siguientes: Una vez considerado el paciente en estado de muerte cerebral se puede llevar a cabo el trasplante.Sin embargo, es totalmente necesario que durante la extracción del órgano a trasplantar se mantenga el pulso, el corazón debe seguir latiendo.Las variantes que se pueden referir como productos bioterapéuticos a partir de tejidos de origen humano son diversos: Los tejidos laminares como la piel y el amnios, pueden ser utilizados frescos o preservados.Pero pueden ser aplicadas —sobre todo el amnios— en diversas especialidades quirúrgicas, como la oftalmología, la otorrinolaringología, la ginecología, la dermatología, la cirugía plástica, etc.Entre los tejidos más utilizados en el mundo están todas las diferentes formas de material óseo, para la reparación anatómica y funcional del esqueleto, las articulaciones o sectores tendinosos.La preservación se realiza a extremas temperaturas bajo 0 °C en medio de nitrógeno líquido (–196 °C) o sus vapores (–142 °C).También pueden crio preservarse segmentos venosos para diferentes aplicaciones en cirugía vascular de reemplazo.[7] El sistema inmune reconocen las células del injerto que muestran estas moléculas extrañas como invasoras, y ataca el órgano trasplantado en un proceso llamado rechazo.[10] Además de hacer pruebas genéticas para determinar el tipo HLA, se debe comprobar que el suero del receptor no tiene anticuerpos preformados que reaccionan con las células del donante y pueden causar rechazo hiperagudo.[11] Posteriormente al trasplante alogénico la persona receptora debe recibir fármacos inmunosupresores,[12] para evitar que el órgano sea reconocido como extraño y se produzca un rechazo.[14] El rechazo acelerado es una complicación rara que se manifiesta durante los primeros días tras el trasplante.[13] A veces se puede ver evidencia de fibrosis, necrosis e inflamación.[8][13] El diagnóstico se hace con biopsias y varias pruebas de función del órgano, incluyendo estudios ecográficos.[15][13] El rechazo agudo es mediado por linfocitos T aloreactivos que reconocen antígenos del injerto.La respuesta inmunitaria puede ser tanto humoral como celular, frecuentemente involucrando la producción de anticuerpos aloreactivos.[17] Cambios histológicos incluyen la fibrosis, alteraciones en los vasos sanguíneos, y signos de inflamación.[8] Generalmente no responde bien a tratamiento con inmunosupresores, y en muchos casos el injerto muere finalmente.Los medicamentos inmunosupresores tienen importantes consecuencias adversas, el número de donaciones aumenta, pero sin llegar a cubrir las necesidades mínimas y no parece sencillo poder trasplantar tejido nervioso.Muy probablemente estas terapias van a pasar en un futuro próximo por la medicina regenerativa, que se basa en la utilización de las células madre y cuyo objetivo es regenerar cualquiera de los tejidos u órganos que no funcionan sin provocar daños en el paciente.
Recreación del primer trasplante de corazón, realizado en
Sudáfrica
en 1967.