Tona (España)

La población posee un denso pasado histórico que ha dejado abundantes vestigios.

Las primeras huellas de actividad humana en el término proceden del Neolítico.

En el llamado Camp de les Lloses se descubrieron los restos de un Vicus romanorepublicano de los ss. II-I a. C. Parece haber tenido un origen ibero (ss. V-III a. C.) el asentamiento en la cima del cerro que domina la población, alrededor de la iglesia de San Andrés (documentada desde 888 u 889) y del llamado castillo de Tona (en realidad una torre cuadrada cuya finalidad exacta se desconoce).

A lo largo de los siglos se desarrolló un nuevo núcleo de población en la parte más llana que quedó consolidado a principios del siglo XIX con la construcción de la nueva iglesia parroquial.

Llegó a tener cuatro balnearios, Codina, Ullastres, Roqueta y la propiedad Segalés, de aguas sulfurosas.

Parroquia de San Andrés.
San Miguel de Vilageliu.