[2][3][4] La confusión se debe a que tanto la fiebre como el humo comparten la misma raíz etimológica, «typhos».
[5] Los aficionados italianos al automovilismo son bien conocidos por su amor por Ferrari, aunque también han sido fervientes seguidores de otros monplazas italianos como Maserati, Lancia y Alfa Romeo.
Es común que los tifosi en Italia animen a un piloto no italiano en un Ferrari que adelanta a un piloto italiano en otro monoplaza por el liderato de una carrera.
El propio Patrese solo había pasado a Tambay por el liderato media vuelta antes.
Como reveló David Croft durante la celebración del podio, existe una relación de amor-odio entre los tifosi y Mercedes, que siempre han ganado en Monza desde el inicio de la era turbo híbrida hasta 2018.