En muchas culturas tradicionales, los tambores tienen una función simbólica y se utilizan en ceremonias religiosas.
[6][7] Los griegos llamaban a este instrumento tympanon o typanon, y los romanos tympanum.
En Las bacantes de Eurípides, Baco encargó a sus secuaces capturar los tambores que utilizaban los frigios.
Afirma que estos tambores, fueron "inventados por mí y por Rea o la gran madre de los dioses, Cibeles".
En ningún monumento antiguo se ve un tambor con dos pieles, si bien existen textos sobre ellos en obras del Bajo Imperio.
Es indudable que los pueblos ibéricos adoptaron el tambor tomándolo de los árabes ya en la Edad Media.
[10] En el área cultural andina, los tambores eran usados para acompañar ceremonias y fiestas.
En la costa sur, los nazca desarrollaron su propio tambor típico, el cual se caracterizaba por su nivel decorativo y escultórico.
[11] La tipología viene determinada por elementos varios como son: En razón de la forma del resonador, los tipos que aparecen son: Tambores cónicos, o más exactamente troncocónicos, con la base con un diámetro más estrechado que la parte superior, en la cual se percude.
También al Sudeste asiático se encuentran, por ejemplo en Java y en las Islas Nias.
También hay en el mundo árabe (en Irak, Turquía, etc.) y en otras zonas del continente asiático como Corea, India o Tíbet; este último se construía tradicionalmente con dos cráneos humanos recortados y contrapuestos, hecho que le daba unas connotaciones mágicas; entremedias sihi encuentra ligada con una cuerda la baqueta que pica alternativamente una membrana y la otra cuando se hace girar rápidamente el tambor.
Así producen y modulan los diferentes sonidos los tambores hablantes de Nigeria.
Tambores de estos tipos están asociados a los rituales y al chamanismo en varias culturas, como por ejemplo entre los esquimales o los lapones; en estos casos es habitual que las membranas tengan decoración de carácter simbólico.
Algunos tienen un mango en línea con su diámetro para sujetarlos, mientras que otros se cogen directamente por el marco.
En este caso se trata de un instrumento mixto, membranófono e idiófono.
Modernamente la pandereta en muchos contextos se construye en metal y ya ha perdido la membrana, de forma que es sólo un idiófono.