Su padre, Leonard Zwinger, era un peletero originario de Bischofszell, en Turgovia; este había recibido en 1492 cartas de nobleza del emperador Maximiliano I, pero a los cinco años Theodor lo perdió, por lo que se educó con su tío el impresor Oporin y su socio Conrad Lycosthenes; cuando su madre se volvió a casar volvió a alcanzar un buen nivel de subsistencia.
Y en las representaciones teatrales que, como de costumbre, concluían el año escolar, fue escogido para interpretar el personaje del Amor.
A su llegada trabajó como oficial en la imprenta de los Bering, permaneciéndo allí tres años.
Tras su retorno a Basilea en 1559, sus amigos, para asentarlo, le hicieron casarse con la viuda de un rico comerciante.
Su mejor biografía, tal vez, es la Vie de Zwinger, que se encuentra en las Athenœ rauricœ, p. 208-244.