Tespio

Al menos un autor lo denomina también como Testio[1]​ (en griego Θέστιος: Théstios), y es que ambas grafías suelen confundirse en los manuscritos.

[7]​[3]​ Estas muchachas aparecen el una de las obras del pintor Gustave Moraeu.

Tespio, deseoso de que sus hijas tuvieran un hijo con él, se las fue ofreciendo una a una cada noche durante los cincuenta días que se alojó allí, aunque Heracles no se dio cuenta ya que llegaba muy cansado de la cacería.

[7]​ Otra versión dice que se acostó con ellas en una sola noche, y solo una rehusó, por lo que en castigo Heracles la condenó a servir siempre virgen en el templo dedicado a él mismo en Tespias.

[13]​ Heracles, junto con los calidonios, emprendió una expedición contra los tesprotos y finalmente tomó la ciudad de Éfira; mientras permanecía allí ordenó a Tespio que se quedara con siete de sus nietos y enviara otros tres a Tebas y los cuarenta restantes a la isla de Cerdeña para colonizarla.

Las hijas de Tespio