Tracia está entre las áreas más ricas en descubrimientos arqueológicos, muchos de los cuales están formados por ajuares funerarios, otros por tesoros y piezas halladas aisladamente.
Al principio se atribuyó su procedencia a Jonia e influida por el arte aqueménida.
Se puede pensar en una procedencia minorasiática o póntica de los objetos, cuya factura, es evidentemente griega.
Estas características se acentúan en las regiones más interiores, con resultados particularmente originales en el área del pueblo de los getas de Rumania y en la Bulgaria del norte, Se ha discutido mucho sobre la cronología y sobre el origen de este arte ecléctico, durante mucho tiempo atribuido a los escitas.
La cronología de estas piezas sigue siendo incierta, aunque la mayoría son generalmente asignadas al siglo IV a. C.