[1] La conmoción se sintió aproximadamente a las 03:00 hora local por los residentes en la península y las Islas Kuriles.
[2][3] Se cree que los tsunamis generados por este terremoto son los más destructivos y más grandes jamás producidos en la región, junto con el terremoto de 1952.
Muchas casas, construidas con madera y piel, pertenecientes a los indígenas fueron arrasadas.
[2][5] La deformación co-sísmica a lo largo de las costas fue tan drástica que los nativos no pudieron reconocer la región ni ubicar sus asentamientos.
Otra ola de 63 metros barrió toda la costa, matando a muchos nativos y destruyendo sus asentamientos.