Teoría crítica de la raza (en inglés critical race theory o CRT) es una concepción teórica que estudia la estructura social y la cultura en su relación con las categorías de raza, derecho y poder.
[1][2] Su marco teórico tiene sus raíces en la teoría crítica, que sostiene que los problemas sociales son causados e influenciados por las estructuras sociales y supuestos culturales, por encima de factores individuales y psicológicos.
Esta corriente de pensamiento pone en foco las dimensiones del racismo visto como estructural e inscrito en el funcionamiento social, dentro de las instituciones (legales, educativas, administrativas, policiales, carcelarias, empresariales) y en las llamadas “microagresiones” durante interacciones sociales diarias.
Posteriormente, el enfoque influyó en otras disciplinas, que a su vez inspiraron el desarrollo de teorías críticas.
[11] Más recientemente, la teoría crítica de la raza se ha impartido en el Reino Unido, Canadá y Australia.
Paul (1992), donde la Corte derogó una ordenanza anti-prejuicio aplicada a un adolescente que había quemado una cruz, los académicos Mari Matsuda y Charles Lawrence afirmaron que la Corte no había prestado suficiente atención a la historia de discurso racista y el daño real producido por el discurso.