Teodoro Cardenal Fernández

En su juventud se trasladó a Palencia, donde realizó sus estudios eclesiásticos en el Seminario de la capital castellana.

Retomó su formación académica en Roma, donde se doctoró en Teología en la Universidad Gregoriana.

[1]​ El arzobispo de Oviedo, Francisco Javier Lauzurica, le pidió que fuera a la diócesis asturiana.

Ambos se habían conocido en Palencia, cuando Lauzurica era el obispo de la diócesis castellana.

Su ministerio pastoral al frente de la archidiócesis burgalesa, muy identificada con el Concilio Vaticano II, destacó por su carácter sereno, sobrio, cortés y atento, y como brillante predicador y director de ejercicios espirituales.