Seguido el anuncio público, la iglesia en ese país buscó un terreno adecuado, escogiéndose un antigo galpón donde se exhibían vehículos para su subasta.
Debido a los retrasos causados por una huelga de camioneros, los materiales necesarios no llegaron sino unos días antes de lo anticipado.
[4] El acabado de granito se estaba frizando 24-horas al día hasta la noche anterior a la dedicación.
[6] Por ser en estados cercanos, el entonces presidente de la iglesia SUD Gordon B. Hinckley tenía pautado dedicar ambos templos.
[6] Sin embargo el avión donde viajaba Hinckley tenía desperfectos mecánicos que no fueron arreglados en tiempo para el despegue asignado, se retrasó la dedicación del templo de Hailfax, pautado el día anterior al de la dedicación del templo de Regina.