[1][2] Al templo, por su cercanía a las comunidades, asisten Santos de los Últimos Días provenientes del norte del estado de Colorado, Nebraska Occidental y el sur de Wyoming.
Tras el anuncio público, la iglesia en ese país buscó un terreno adecuado, finalmente se decidió construir el templo religioso en un terreno que anteriormente había sido zonificado para la construcción de residencias, supermercados y otros negocios.
[3] Mediante un acuerdo intergubernamental entre el Condado de Larimer y la ciudad de Fort Collins se consiguió modificar la zonificación para que permitiese la construcción del templo, su área de estacionamiento y sus jardines en el terreno adquirido por la Iglesia.
Cuenta con dos salones empleados para las ordenanzas SUD, tres salones de sellamientos matrimoniales y un batisterio.
[10][11] El 26 de agosto de 2015, una estatua del ángel Moroni similar a las que culminan muchos otros templos fue puesta en su sitio.