Andrzej Badarzewski era un comisario de policía con gran éxito, que se mudó con su familia a Varsovia en 1835.En 1857, las autoridades Czaristas dieron a Baranowski la Orden de San Estanislao tercera clase.Esta pieza, llamada Plegaria de una virgen (Modlitwa dziewicy-The Maiden’s Prayer-Das Gebet einer Jungfrau, 1856), se publicó inicialmente con el título La priere d’une vierge, y se compuso para ser tocada como música de salón durante reuniones sociales.Esta pieza, que se la recuerda como corta de dificultad media, solía ser muy popular entre los pianistas amateurs, sin embargo ha sido olvidada casi por completo.Unos la apreciaban por su melodía encantadora y romántica, otros la describieron como “paparruchas sentimentales de salón”.