La teja romana es un tipo de teja empleada en la cubiertas de edificios con tejado inclinado.
Se caracteriza por su aspecto rectangular y por tener la pieza canal plana, con los bordes laterales levantados y la cobija curva.
Se fabricaban de piedra y de cerámica.
[1] Las denominadas tejas romanas son una adaptación moderna de la tégula romana (de dos piezas), se diferencia de esta en poseer la canal y la cobija en una misma pieza.