Tasa de granos

Con objetivos más amplios, se estableció también como tasa de granos y mercaderías.Los planteamientos fisiócratas o proto-liberales de mediados del siglo XVIII plantearon su supresión en España y Francia, con fuertes resistencias que llevaron a su reposición.Mientras tanto, en Inglaterra el debate sobre el comercio de granos[1]​ tenía otro ámbito, el de las Corn Laws, que, dificultando o incluso prohibiendo las importaciones, pretendían lo contrario: el mantenimiento de precios altos.[4]​ Pósitos y obligados del abasto eran instituciones que permitían intervenir en el mercado.Ambos son identificados como economistas fisiócratas, como Francois Quesnay o Dupont de Nemours, que defienden la libertad económica (laissez faire) y ven en cualquier reglamentación o intervención estatal un establecimiento de privilegios particulares en perjuicio del bien común (simultáneamente se planteó la libertad de establecimiento para cualquier oficio en contra de los gremios).