Tarja (moneda)

La tarja, llamada también sesena, era una moneda de vellón fabricada en Navarra por Catalina I de Navarra y Juan III de Navarra en 1495[1]​ y en España por Felipe II el año 1566.[2]​ En principio era de cobre, entrando en cada 8 onzas de peso 62 granos de plata,[3]​ que hacen una onza, 5 ochavas, 4 tomines y 8 granos: cada moneda pesaba cinco granos y tres quintos y valía un cuartillo de real.Por un lado tenía un escudo con una corona y dentro de él un castillo con 3 torres y en el otro lado, un escudo coronado y dentro de él un león grande: la inscripción era del mismo Felipe II como rey de España.En el caso de Navarra Yanguas y Miranda indicaba en 1495 que el rey Juan III de Navarra acuñó ese año «sesenes a 16 cornados cada uno y ley de 3 dineros y 15 granos sin beneficio: talla 8 sueldos y 4 dineros, con la cruz en un lado y Y. K. en el otro que eran las iniciales del rey Juan y la reina Katalina.»[4]​[5]​ Remarca esta idea cuando los vuelve a mencionar que los «Sesenes llamados también tarjas» era una «moneda de 16 cornados a ley de 3 dineros y 15 granos: talla 100 piezas: valor del marco... 58.»[6]​ Como indica Aloiss Heiss, «Carlos V dio varias Ordenanzas en 1524 acerca de la uniformidad del valor de las monedas: entre otra cosas dispuso que el ducado de oro castellano corriese en Navarra por el valor de 6 libras y 5 sueldos carlines, equivalentes á 375 maravedís de Castilla: el castellano de oro por 8 libras, un sueldo y 8 dineros: la dobla de la banda por 6 libras, un sueldo y 8 dineros: el florín de oro de Aragón por 4 libras y 10 sueldos, ó 270 maravedís castellanos: las coronas de Francia, ó escudos del sol, por 5 libras, 17 sueldos y 4 dineros: los ducados navarros, de los reyes D. Juan y D.a Catalina, por 5 libras y 2 sueldos: los reales de plata de Castilla por 11 sueldos y 4 dineros de Navarra:  la libra de Navarra por 10 groses, cada gros por 2 sueldos, y cada sueldo por seis cornados, que las tarjas acuñadas por los reyes anteriores valiesen 16 cornados.»[7]​ Añadiendo para 1561: Los cornados de las mismas tarjas valían un maravedí 5/32 vellón.Y así siguió hasta el año 1580 en que se especificó que las tarjas, y medias tarjas, fuesen de ley de 3 dineros y 15 granos, y que saliesen 116 tarjas de cada marco, cuya moneda equivalía en su ley a la de los sesenes acuñados por D. Juan de Labrit en 1495, con la diferencia de que entonces se dividía el marco en 100 piezas y ahora en 116.»[9]​[10]​ Poco después afirma que «esta moneda tan adulterada llegó a desaparecer del todo en el año 1604 en que se acuñaron blancas, o cornados, sin la mezcla de plata que antes tenían, aumentando en cobre la cantidad equivalente al valor de la plata suprimida; pero aun este aumento se suprimió cuatro años después en que se acordó acuñar cuartos, medios cuartos y cornados, o blancas de cobre, con el mismo peso que antes tenían los que llevaban mezcla de plata.
Tarjas (sesenas) de Catalina I y Juan III, reyes de Navarra.