Tablilla de maldición

Una tablilla de maldición (en latín defixio, y en griego κατάδεσμος katádesmos) era un medio frecuente para maldecir en el mundo grecorromano, por el que alguien pedía a uno o más dioses que dañasen a otros, con frecuencia como venganza.Estas tablillas se colocaban normalmente bajo tierra, ya fuera enterrándolas en tumbas, arrojándolas a manantiales, pozos o piscinas, escondiéndolas en santuarios subterráneos, o incrustándolas en las paredes de los templos.Según Peter Green la sociedad grecorromana usaba la magia para controlar la naturaleza.[13]​ Las primeras tablillas de maldición se descubrieron en una ciudad italiana, Selinunte, en Sicilia.Mientras los antiguos griegos habrían temido el poder de estas tablillas, algunos historiadores han comparado su uso con insultar a alguien verbalmente en la época actual.A finales del siglo XX se descubrieron objetos que arrojaron luz sobre el papel que tenía la magia en las vidas de los ciudadanos griegos de todas las clases sociales.John Gages, un importante experto en este campo, apoya la segunda opción ya que las mujeres enamoradas tenían menos posibilidades de expresar sus emociones en la sociedad griega.Los eruditos discuten sobre los posibles motivos que les llevaban a valerse de la magia erótica, que ofrecía soluciones para el amor no correspondido, controlar sexualmente a la víctima, ganancias monetarias y un mayor reconocimiento social.Los conjuros de amor tenían una base similar en todo el mundo mediterráneo,[16]​ que se podía reajustar según las diferentes situaciones, usuarios y víctimas.
Tablilla de maldición de Eyguières
Tablilla de maldición romana, encontrada en Tongeren (Bélgica), Museo Galorromano de Tongeren