[1] Fue conocido por su lealtad al rey y a su país, habiendo ganado su fama como un buen comandante militar así como por sus inversiones en el desarrollo de sus tierras, aunque tambiémn existen leyendas sobre su crueldad -aunque éstas empezaron a circular entre sus enemigos.
Es conocido generalmente por la construcción, reconstrucción o ampliación de muchas fortificaciones en sus dominios.
Recapturó el castillo de Pilica al comandante sueco Lindorn.
Stanisław envió a algunos de sus hombres con provisiones (vacas) y doce cañones para defender el monasterio.
Durante la contraofensiva polaca contra los suecos tomó parte en las luchas de Siewierszczyzna (Severia).
Warszycki escapó con vida por poco y denunció a Orzechowski al Tribunal de la Corona.
Fue conocido como mediador y fue un personaje activo en la política de Polonia.
Otra historia cuenta cómo se enfureció al enterarse de que su mujer había recibido a un invitado masculino, y sospechando que le estaban engañando, quemó parte del castillo.
Del mismo modo, otra historia nos cuenta sobre su avaricia, con ocasión del matrimonio de su hija Bárbara, a la que prometió una gran dote pero a la que sólo le dio avaricia y rencor.
Esta historia trata de como Stanislaw intentó comprar un pueblo en concreto.
Cuando volvió para quejarse, Warszycki le pagó un buen precio, pero rechazó el devolverle sus campesinos.