Soyuz MS-22

[2]​ En diciembre de 2022 sufrió una averia y tuvo que ser sustituida por la Soyuz MS-23 que fue lanzada el 24 de febrero de 2023, para que su tripulación tuviera una nave segura para el regreso a la tierra.

[4]​ El día 14 de diciembre durante los preparativos para una caminata espacial planificada para el día 15, por los cosmonautas Prokopyev y Petelin, los equipos de tierra detectaron una fuga significativa de una sustancia desconocida en la parte trasera de la nave espacial Soyuz MS-22 acoplada al módulo Rassvet en la ISS.

[5]​ La Nasa y Roscosmos colaboraron en una investigación de la fuga externa detectada en la nave espacial rusa.

[6]​ Para realizar la investigación de la causa de la fuga, Roscomos utilizó el día 15 de diciembre, el brazo ERA nuevo en el módulo Nauka para realizar inspeciones visuales mediante las cámaras del brazo, dirigido por la cosmonauta Anna Kikina.

La Nasa proporcionó una inspección adicional del exterior de la Soyuz usando el brazo robótico Canadarm 2 del segmento americano, el 18 de diciembre y se determino que lo más posible es que un micrometeoroide, impactó a unos 7 km/s provocando la fuga, ya que un resto de basura espacial tan pequeño no dispone de tanta velocidad para causar ese agujero en el material de la tubería.