Todo el vegetal del frijolito es muy venenoso, tiene el alcaloide citisina (no mescalina, como sugiere el nombre).Las semillas y otras partes de la planta se usan como alucinógeno por varios pueblos originarios, pero es impreciso, debido a confusión en los nombres.Los síntomas de envenenamiento por la citisina son muy desagradables: náusea, vómito; dosis muy pequeñas como una sola semilla puede ser fatal.Esta especie descrita por Ortega en 1798 como Broussonetia secundiflora, fue incluida en el género Calia por Yakovlev[2][3] En 2011, Kanchi Gandhi et.al.establecieron que el nombre correcto para el género es Dermatophyllum y para la especie D.