Es un árbol caducifolio ornamental, común en Europa y América, con unas características flores blancas que aparecen a fines del verano, cuando muchos otros árboles ya han perdido la flor.
Difieren del género relacionado Calia (frijolito) en ser caducifolios y en sus inflorescencias que son axilares, no terminales, en racimos péndulos.
Las hojas son compuestas imparipinadas de 4 a 10 folíolos de cada lado del raquis y un folíolo apical terminal, a menudo algo más grande que los laterales, con pelusa, oval-lanceoladas, agudas, verde-oscuras superiormente y glauco en el envés, márgenes enteros y nervaduras que se prolongan hasta el ápice.
Las inflorescencias racemosas forman grandes panojas terminales de hasta 25 cm con flores estivales de delicado perfume, colores blanco-cremosas; estas últimas tienen el cáliz pentadentado, y la corola con carena rodeado de 2 pétalos algo separados, 10 estambres libres y el ovario superior.
Dicho fruto aún no está maduro y se queda en el árbol cuando este último ya ha perdido su follaje a principios del invierno; maduran y caen algo más tarde.