Una soldadera, también conocida como adelita, fue una mujer involucrada en la Revolución mexicana, luchando o acompañando a los soldados.
[2]Cabe destacar que el mito de la soldadera como mujer exclusivamente luchadora no es totalmente cierto.
[3] Vale notar que mientras que las soldaderas podían pelear si querían, sus roles más comunes consistían en proteger a sus maridos y a sus familias de enfermedades y del hambre.
Después de crear esa fama, pudo revelar que era mujer y aun así siguió luchando.
En la batalla de Torreón en 1914, tomó gran parte del éxito junto a otras cuatrocientas mujeres.
Herrera se convirtió en una espía para los carrancistas, y eventualmente fue asesinada cuando trabajaba de camarera en Jiménez.
Ella luchaba con los rebeldes porque su hermana se murió durante un ataque por los federales en la ciudad que vivía.
[8] Muchas mujeres acompañaron a las tropas porque querían ir con su familia o con su marido.
[11] El rol de la mujer mexicana cambió durante la Revolución y esto tuvo implicaciones duraderas en la cultura popular.
La soldadera mala, La Pintada, es agresiva, violenta, y muy franca igual que los soldados.
Estas canciones son baladas fáciles de componer y usan un lenguaje simple.
[17] Este corrido trata del amor entre un hombre y una mujer llamada Adelita.
La confusión aumentó después de la guerra cuando México buscaba las identidades que quedarían bien en la cultura posrevolucionaria.