Ángela Jiménez
)[1] fue una soldadera, abanderada, experta en explosivos, espía y a veces cocinera.[1] Algunas fuentes indican que tuvo un cargo político en Tehuantepec,[2] otras indican que era su padre quien ostentaba este cargo.[3] En 1911, soldados federales catearon su casa en busca de rebeldes y trataron de violar a su hermana, quien con una pistola primero mató al soldado y luego se disparó a sí misma.Después de presenciar esto, Ángela Jiménez juró matar federales, se vistió de hombre y se hizo llamar Ángel.[1] Se cree que su vida revolucionaria fue el modelo utilizado por Elena Poniatowska para dibujar el personaje de Jesusa Palancares en Hasta no verte, Jesús mío.