El acento tonal se volvió acento de intensidad, la aspiración [h] desapareció y la iota suscrita [ᾼ] se volvió muda.
Esto trajo como resultado que los acentos, los espíritus y las iotas suscritas no representaban ya la realidad de la lengua hablada, la δημοτική γλώσσα (dimotikí glóssa).
En consecuencia, en abril de 1982, el gobierno griego introdujo por decreto el uso oficial del llamado sistema monotónico, mediante el cual no existe más que un solo tipo de acento escrito, el τόνος (tónos [ ´ ]), que indica la posición del acento prosódico y que reemplaza a los otros acentos.
El acento monotónico no se usa normalmente en palabras monosilábicas, pero puede tener también una función diacrítica en ellas, como el acento ortográfico en español, para distinguir palabras homófonas: που, pronombre relativo y πού, adverbio interrogativo de lugar.
Un símbolo que sobrevivió a la reforma ortográfica griega fue la diéresis ( ¨ ).