Simacota inicialmente se llamó Camacota, vocablo indígena que significa «Cultivo en lugar escarpado».
Su establecimiento en la región se tardó más de 60 años por la fuerte resistencia que opusieron los indígenas.
[3] Simacota ha estado presente en los principales acontecimientos de la vida nacional como protagonista de primer orden: Posee una riqueza hidríca fenomenal que lo posiciona muy bien a futuro ya que lo bañan los ríos Suárez y Opón y las quebradas La Colarada, Santa Rosa, La Vega, La Guamaca, Cinco Mil, Montuosa, San Miguel, Gacha, entre otras; las Ciénagas de Vizcaína y Opón, así como numerosos nacimientos.
Actualmente se explota el potencial turístico del municipio, especialmente con deportes de aventura, aprovechando bellos parajes naturales para practicar espeleología, canotaje, caminatas ecológicas y escalada bajo agua en la Cascada del Mico.
Y en enero, el Festival del Retorno, donde se reencuentran las familias en un ambiente festivo que congrega a muchos visitantes.