En 1762 fue trasladado a la Compañía Manezh (Манежная рота).
Durante la guerra ruso-turca (1787-1792) comandó fuerzas conjuntas de batallones de cazadores y granaderos y participó en la toma de Khotin, Akkerman y Bendery.
Ayudó a sofocar una rebelión Kirguiz y aseguró la elección del khan para la marioneta apoyada por Rusia.
Durante su partida al ejército de primera línea (1805) el emperador Alejandro I dejó a Viazmitínov como el comandante en jefe en San Petersburgo.
Fue enterrado en el Cementerio Lazarevskoe del Monasterio Alejandro Nevski.