Secuestrados (película de 2010)

Jaime, su esposa Marta y su hija Isa acaban de mudarse a un nuevo hogar.

Jaime se arriesga e intenta convencer a una mujer en el cajero automático para que llame a la policía, pero ella cree que él está tratando de robarla y le da todo su dinero.

Un guardia de seguridad llama a la puerta para decir que los vecinos se han quejado de que la televisión está demasiado alta y pregunta si puede entrar y mirar alrededor.

Cuando Strong Thief intenta violar a Isa nuevamente, ella agarra una estatuilla y le aplasta la cabeza.

Mientras esto sucede, Jaime y Head Thief están en el automóvil, conduciendo.

Cuando Jaime vuelve en sí, toma el arma de Head Thief y regresa a casa.