Embarcaron en un barco milagroso que, sin timón ni velas, atravesó el mediterráneo hasta llegar al lugar llamado Oppidum-Ra, o Nuestra Señora de Ratios (Ratios significa barca), que se convirtió en Nuestra Señora de la Mar y, desde 1838, en Saintes-Maries-de-la-Mer (Provenza), cerca de Arlés, donde se detuvo.Una vez al año llevaba en procesión la figura de Astarté y entraba con ella en el mar para recibir la bendición divina.Existen corrientes esotéricas, como la wicca trinitaria, que la consideran parte de la Triple Diosa junto a sus supuestas abuela la Virgen María y madre María Magdalena, las tres juntas conformarían en un todo a Sofía (sabiduría), considerada el Espíritu Santo y la Gloria de Dios en el cristianismo oriental.Hacia 1447 Renato de Anjou pidió a Nicolás V, bula para buscar los cuerpos santos que secularmente se veneraban en la región, y tras hallar los restos mortales de María Magdalena y sus compañeras se colocaron en ricos relicarios.Como Sara no tenía la misma categoría sus reliquias se pusieron en un relicario sencillo, en una capilla diferente, así lo registró Jean de Labrune.Es vista como la patrona del pueblo gitano, junto con el beato Ceferino Giménez Malla.Pero fueron despojados del trono de Francia y sus últimos miembros resultaron asesinados por una conspiración en el siglo VIII.Según El enigma sagrado, dicho secreto fue pasado por los sobrevivientes servidores de los Merovingios a los Caballeros templarios, quienes abrazaron la creencia y sirvieron en la Primera cruzada para recuperar el Grial: los restos de Santa María Magdalena.