es un santuario sintoísta o el área natural que le rodea.A diferencia de las iglesias y mezquitas, tradicionalmente un jinja no posee características de una capilla o un lugar para la predicación; su único propósito es para consagrar y realizar cultos a un kami o deidad sintoísta (aunque también un espíritu o el alma de un fallecido puede ser considerado kami).En los siglos recientes, especialmente los kami más importantes han sido santificados a través de Japón.Existen alrededor de 80 000 a 100 000 jinja registrados en Japón (el número menor indica los "jinja combinados"), aunque el número real puede ser mucho mayor (debido a que existen santuarios muy pequeños o ya no son administrados).Los jinja se autofinancian a través de donaciones y asociados con las municipalidades.